Desidia gris, luz intermitente, televisión prendida.
Prefiero el ruido a escucharme a mí misma.
Busco la música, busco al amante, busco al amigo, busco no encontrarme.
Me huyo, me ignoro, me incomodo yo misma, termino evitándome cual presencia incómoda.

¿La realidad? La pinto, quizás con tantas capas cambie. La modifico, quizás pueda engañar a alguien.

Me escondo y creo personajes, cambio mi personalidad para ajustarse. Es todo parte de un plan, de jugar a alcanzar un objetivo más fuerte que uno mismo, de ganar y sentir que se tiene el control. Por eso creo una vida ajena, distante y divertida. Cuando me aburra se terminará.

¿El final? Inesperado.

¿El comienzo? Inadvertido.

¿El engaño? Mi satisfacción.

¿El secreto? El objetivo.

¿Juegas?