Le fateuille

Un poco de mí, para tí.

Nombre: Ana
Ubicación: Mexico

Me gusta el blog, puedo escribir todo lo que hay dentro de mí, sin pensar en nada más.

lunes, octubre 18, 2010

Somos polvo de estrellas. Tarde o temprano regresaremos a nuestro origen, uniéndonos a esa hermandad cósmica a la que pertenecemos. Cuando mi espíritu regrese a las estrellas, quiero que mi cuerpo siga vivo; que mis huesos sean donados, mi cabello se utiize, mis córneas vuelvan a ver en otra persona y que mi corazón siga latiendo. A final de cuentas es vida, y ésta debe seguir su curso, no importa la forma o manera.

Hay tantas cosas por hacer cuando uno se vuelve estrella. Se alumbran mundos y se cuidan niños. Se da calor a otros y se sirve de inspiración a historias fantásticas. Se es adorado, añorado, y en cierta manera envidiado, en un buen sentido claro está. Por eso las estrellas viven millones de años, porque sus listas de pendientes son largas. Una vez que terminan explotan de alegría y se vuelven polvo, que se deposita en otros planetas y forman vida. Es un ciclo, que por ser largo no alcanzamos a ver, pero está presente.

Muy probablemente me convierta en estrella primero que tú. Aunque faltan muchos años, puedes tener la certeza de que llegado el momento te voy a cuidar, estaré a tu lado esperando que también seas polvo y regreses al cielo como una estrella.