Le fateuille

Un poco de mí, para tí.

Nombre: Ana
Ubicación: Mexico

Me gusta el blog, puedo escribir todo lo que hay dentro de mí, sin pensar en nada más.

miércoles, junio 05, 2013

Dios existe y es más inteligente que uno. Cuando crees que las cosas están saliendo mal, no es así, simplemente no alcanzamos a comprender la magnitud del plan maestro que se tiene trazado. Estos planes parecen que no tienen explicación cuando los ves a futuro; cuando volteas hacia atrás y ves cómo se desarrollaron, comprendes que no pudo ser de otra manera y  la tendencia de la gente es de maravillarse por esto. Claro, incluye las cosas malas, las que no nos gustan, las malas jugadas y aquello que cambia nuestros planes. Como seres humanos, somos tercos como mulas y tendemos a hacer lo que nos pega en gana, cosa que a veces no es lo mejor. Por eso Dios nos envía cambios, para volvernos a poner sobre la mesa la oportunidad de decidir qué hacer y así lograr que se cumplan lo que uno realmente anhela en el fondo.

Dios es creativo, si fuera persona trabajaría en una agencia de mercadotecnia. No es nada paternalista, te deja decidir y darte en la torre las veces que sean necesarias con tal de aprender una lección. Nos deja tener miedos, angustias, dolor y temor ante la vida; cuando él solamente se ríe porque no dejamos actuar y que las cosas fluyan de acuerdo a un plan más grande que nosotros mismos.

Como dije, Dios es creativo, por eso buscó la manera más rara de darnos las respuestas a lo que preguntamos: la voz que tenemos en el corazón. Cuando tengas dudas sobre qué hacer y qué decisión tomar, escucha a tu corazón, no a tu cabeza. Esa es la respuesta correcta. Quizás la idea sea loca, atrevida, irracional, imposible, sin pies ni cabeza. Pero, ¿no son así las grandes ideas? El llevarla a cabo, el intentarlo es lo que hace vivir a uno. Si todo tu ser lo pide, la forma/manera/proceso es lo de menos; para eso está Dios, déjaselo en sus manos y ocúpate de vivir y ser feliz. No hagas tragedias griegas porque no se dió. Disfruta por lo que viene, porque cuando un cambio se presenta es porque viene algo mucho mejor, pero si estás ocupado viendo lo que perdiste, pasarás de largo todo aquello que ganaste.

Dios también te da toda la oportunidad para actuar. Cuando las cosas no se dan caídas del cielo, es porque nos toca hacer algo, o al menos intentarlo. Si la idea, cosquilleo, deseo nace de tu corazón, es la luz verde que se manifiesta y te dice: "actúa". Repito, la manera/forma es lo de menos.

Todo esto es lo que me hace estar tranquila, porque puedo descansar. Mi única tarea es ser feliz, disfrutar y seguir los deseos de mi corazón. El resto es tarea de Dios, ese es el trato. Cuando un cambio se manifieste o tenga una mala experiencia, es un aprendizaje y tengo dos opciones: hago una tragedia griega o sigo adelante.

Elijo seguir adelante y ser feliz. Elijo agradecer todo lo que me ha pasado y abrirme a nuevas experiencias que vengan. Mis planes son simples: cumplir mi misión, ayudar, ser feliz y disfrutar. La forma, el lugar, las personas las iré decidiendo con las opciones que me envíen de allá arriba. Porque ese fue el trato y es un trabajo de equipo.

Sueño con sentir tus labios en los míos.


Tengo sed de escuchar tus palabras hablándome al oído.

Muero por enredar mis dedos en tu cabello.

Perderme acariciando tu piel tersa.

Me quedo dormida pensando en ti.

En este mar de sensaciones me pierdo,

observando el coral rosa y azul que se entrelaza en una nebulosa

en un estallido de paz, intriga y calma.

Dormida recuerdo cada rincón, cada palabra,

cosiéndola en la parte de mi corazón que solo yo conozco.

Despierta me encuentro callada,

porque no quiero que me sorprendan enviándote abrazos con toda mi alma.