Le fateuille

Un poco de mí, para tí.

Nombre: Ana
Ubicación: Mexico

Me gusta el blog, puedo escribir todo lo que hay dentro de mí, sin pensar en nada más.

domingo, mayo 29, 2011

Estoy destrozada. Me duelen todas las atenciones que tienes con ella y conmigo no. Así de sencillo. No tiene caso analizar nada, al final decidiste estar con otra persona, cualquier historia que haya detrás no vale la pena escucharla, al final el resultado es éste. Aceptar esto para mí es un proceso que, sospecho, será difícil; no puedo quitarme de la cabeza que en dos semanas hayas decidido estar con ella y comenzar toda una rutina de pareja, no me lo explico y no quiero hacerlo, no quiero volver a saber absolutamente nada de tí. Quiero que este proceso sea corto, esto implica no volver a verte y alejarme de las amistades que tenemos en común. No quiero estar en un lugar donde en cualquier momento hablen de tí o te puedas aparecer, es incómodo para mí y supongo que para los demás también. No quiero que tomen partido ellos. Quisiera desaparecer, irme a vivir a otra ciudad, alejarme de todo esto, lo cual, sospecho, que también se va a quedar en un deseo.
Llevo llorando muchas horas, empecé hace 3 años cuando estuvimos juntos y me dejaste en claro que fue un juego, un error, algo que no debió haber pasado. ¿Por qué te quise? ¿Por qué dije que sí? ¿Por qué seguí intentándolo? ¿Por qué aposté todo ahora que regresaste? ¿Por qué te esperé? ¿Por qué me duele a pesar de que noté tu indiferencia hace meses? ¿Por qué me esforcé en "mantener una amistad"? ¿Por qué tuve esperanzas? Estoy cansada, no quiero comer, no puedo dormir, tengo naúseas desde anoche, no quiero hablar.
Ya sé cómo voy a reaccionar cuando te vea y qué va a pasar. Estoy conciente de que el muro de contención que pondré va a hacer que te pierda definitivamente. Pero, ¿por qué debería preocuparme? Nunca estuviste conmigo. Lo único que mataré es toda esperanza, aunque eso signifique una amistad nula.
Me han hablado varias amistades, no quiero contestarles ni contarles nada. Voy a escuchar el seguirás adelante, él no era para tí, mereces algo mejor. Cosas ciertas, pero que ahorita no quiero escuchar.