Le fateuille

Un poco de mí, para tí.

Nombre: Ana
Ubicación: Mexico

Me gusta el blog, puedo escribir todo lo que hay dentro de mí, sin pensar en nada más.

domingo, junio 27, 2010

Sofía se preparó para salir en su cuarto. Sabía que estaba mal lo que iba a hacer, pero no le importaba. La decisión se había tomado. Al contrario de lo que pensaba, sentía una gran paz, cosa que le asombraba. ¿No se supone que nos crían de una forma para evitar este tipo de pensamientos? Quizás, por lo pronto no le interesaba. Se paró frente al espejo y vió su larga cabellera roja, sus puntas estaban descuidadas y se veía ursuela, ¿le importará a su víctima?. Al terminar de peinarse se maquilló con esmero, eligió un labial café y sombras rosa pálido; no se debe llamar la atención.

Al saber que el momento se acercaba su exitación crecía. Es una euforia que no se puede describir, piensas en las consecuencias y en lo que sucederá, en los factores que uno no tiene en consideración y sorprenden en último minuto. Se puso su vestido blanco, no sabía cuál era el color favorito de Marcos mas sospechaba que era uno claro. Es preferible una elección neutra. Se puso zapatos negros altos, su estatura es más baja que él y deseaba alcanzarle.

Al buscar sus llaves dudó un minuto. No se atrevía a tomarlas. Es el punto donde el deseo se comienza a materializar y todavía hay vuelta atrás. Estaba a punto de hacer algo que la había inquietado los últimos meses, no quería que solo se quedara en sueños; sin embargo, era más que claro que su fantasía no era compartida por Marcos, por tanto habría que obligarle. ¿Y si se equivocaba? Su vida cambiaría 180 grados, no había margen para el error. Debía ser limpio.

Abrió la puerta. Ya era de noche. Echó cerrojó y se dirigió al automóvil. Al subirse no pudo evitar sonreír: finalmente lo haría.